De cómo conseguimos ampliar el Área de Protección Histórica de Abasto, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Como muchas cosas en la vida, lo colectivo le gana a la soledad del saber y la experiencia individual. Y ésta experiencia es uno de esos casos.
La última década se fueron sumando muchas personas y organizaciones barriales a la idea de proteger la identidad del Abasto, que vistas hoy, una vez lograda la aprobación de ampliar el área protegida en torno al mercado, gana dimensión la participación de cada una de ellas.
La zona de Abasto, dos o tres cuadras alrededor de lo que fuera el Mercado de Abasto Proveedor, tuvo durante los años de funcionamiento de este gigante de la distribución de alimentos, y mucha vida. Eran numerosos los que trabajaban en el mismo edificio, y los que vivían en los alrededores, formándose un mundo a su alrededor de Fondas, hoteles, comercios de venta minorista, galpones de almacenamiento, vías cortas de tren que unía al Mercado con el Ferrocarril del Oeste, bancos, comercios de lonas, balanzas, herramientas, y todo aquello que fuera necesario para las actividades del Mercado.
Ese mundo dejó una huella muy marcada en esta zona de la ciudad, no sólo en sus edificios, sino también en su gente. Los que viven hoy día por allí, claramente se identifican con el Abasto, y no con Balvanera ni con Almagro.
Persisten muchas casas, algunas de ellas con local en la planta baja, y sótanos, donde dicen se maduraban las bananas que llegaban a toneladas al barrio.
Es por eso, y porque todavía quedan muchos de los edificios de planta baja y un piso, identificatorios del paisaje de aquel bullicioso barrio, que nos propusimos trabajar por su identidad, desde Proteger Abasto, en el año 2009.
Fue por aquel entonces que comenzamos a juntar firmas para impulsar un proyecto de ley, difundir mediante diferentes eventos artísticos basados en los valores patrimoniales, recuperando la identidad y revalorizando muchas cosas más que se daban en el barrio. Ello así, porque El Abasto, además, es uno de los barrios con mayor cantidad de centros culturales, muchos de los cuales venían trabajando previamente sobre ejes centrales de la identidad barrial desde un abordaje artístico mucho tiempo antes, casi sin saberlo, por ejemplo, recuperando la impronta que el tango tuvo y tiene en nuestras calles, repletas de milongas y orquestas, de fileteado y Gardel.
Sobre las improntas va conformándose un paisaje cultural urbano, que requieren políticas activas de protección para lo cual, tal como dijeron las especialista de UNESCO en su informe sobre el área: “es fundamental el tratamiento de áreas de la trama urbana como unidades de paisajes, para conservar edificios de valor patrimonial para la ciudadanía, pero también mantener alturas máximas determinadas por estos edificios históricas en nuevas edificaciones, conservar el adoquinado de las calles, preservar las capas del patrimonio inmaterial y artístico de los espacios urbanos públicos, fomentar una estética acorde al paisaje característico y materiales que no atenten contra la sostenibilidad y cambio climático. Así conservaremos la identidad de nuestro barrio, y al mismo tiempo lograremos un beneficio para el buen y sano desarrollo de la vida cotidiana de las personas que habitan o transitan por el lugar. “
Esta caracterización técnica de paisaje urbano nos llegó en la etapa final del proceso de organización, como un importante aporte desde lo académico, que refleja lo que veníamos trabajando y hablando entre vecinos y organizaciones barriales, porque había consenso entre los participantes de Cultura Abasto respecto a que la identidad del Abasto no radica sólo en el valor de los antiguos edificios y sus detalles arquitectónicos, sino en el visión conjunta que dan de forma agrupada a su paisaje. Para ello, la posibilidad de definir áreas de Protección Histórica, en lugar de proteger a los edificios de forma individual, permite reconocer el carácter de una zona que se genera por el conjunto de elementos, que se preservan definiendo pautas también para la protección del espacio público, como parte ineludible de la constitución de un conjunto urbano y como lugar de encuentro, donde se constituye la identidad barrial.
Con todo ese trabajo decidimos, desde Proteger Abasto, presentar un primer proyecto de ley para ampliar el área de protección histórica, que sólo comprendía al edificio del Mercado de Abasto Proveedor, convertido durante los 90 en un shopping. Fue en el año 2014 la primera vez que se presentó el proyecto de Ley de ampliación del Área de Protección Histórica para incluir al entorno barrial, bajo este instrumento que tiene el Código urbano para resguardar el patrimonio de la ciudad. Esta presentación se acompañó con muchas firmas de vecinos y vecinas comprometidas con la propuesta.
El proyecto perdió estado parlamentario sin ser tratado en la Legislatura. Llegó a pasar por la Comisión de Cultura, en una sola reunión, en la que algunos vecinos presentes con sorpresa escuchamos decir a un asesor legislativo que era “demasiado” proteger las casas porque habían sido intervenidas con dibujos de fileteado porteño. Sin dudas, faltaba la mirada integral de lo que representa la protección del patrimonio de la Ciudad, pero más tarde, y dándonos la razón de la importancia de esta técnica para nuestra ciudad, el fileteado fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, el 1 de diciembre de 2015.
Insistimos dos veces más con la presentación parlamentaria. En el 2018, cuando se aprobó el Código Urbanístico, y en el 2021 cuando se incluyeron modificaciones sectoriales. Nuestro proyecto tomaba cada vez mayor profundidad en los fundamentos porque íbamos juntando más y más firmas, así como se sumaban nuevas organizaciones barriales acompañando la propuesta. Logramos desarrollar innumerables acciones que visibilizaron fuertemente el valor del patrimonio del Abasto: Museo Vivo, Comuna Gardel, Parque de la Estación, Casona de Humahuaca, Centro Cultural JJ, Patrimonio Almagro Boedo, Cultura Abasto, Revista el Abasto, Diario Primera Página, Teatro Comunitario Sin Telón, y muchos más.
En el año 2023 concurrimos junto a vecinos de muchos otros barrios a las reuniones convocadas por el área de Planeamiento del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, porque se venía una nueva modificación del Código de Urbanismo.
Les presentamos nuestra propuesta de ampliación de APH 32, ahora ya con la fundamentación que el mismo gobierno había usado para desarrollar su Abasto Barrio Cultural, pero esta vez tampoco fue recepcionado el proyecto modificatorio del APH según el código en vigencia. El Gobierno de la Ciudad usó el barrio desde ese Programa, lo mostraron durante más de dos años. Proteger Abasto participó como organización vecinal del proceso porque, tras discusiones varias, creíamos fundamentalmente en el valor de participar y poder contar la verdadera historia de nuestro barrio. No queríamos que se genere un hito a partir del marketing del Abasto, porque acá hay una historia barrial que contar. Ya nos había pasado con el Maratón, que también impulsó el Gobierno de la Ciudad y transcurrió en las mismas calles del Abasto, pero que nada recuperó de la historia del barrio.
En esa coyuntura, consideramos que era imperioso lograr la protección conjunta del paisaje y la identidad, porque ahora el barrio había sido “descubierto”... y ya sabemos que eso (lamentablemente) acarrea destrucción de la historia y la identidad.
Entonces, no nos quedaba otro camino que intentar otra vez en la Legislatura.
Pero sucedió algo muy distinto esta vez, se formó la Interbarrial BA, que unía a todas, o casi todas, las organizaciones barriales que veníamos luchando por las identidades y el ambiente saludable en Buenos Aires. Desde allí nos organizamos también por otros temas comunes, e hicimos acciones en conjunto que lograron aumentar la fuerza de todas las luchas barriales.
Agregamos nuestro aporte, ahora ya como asociación civil “Cultura Abasto”, con personería jurídica, viendo fortalecida nuestra organización que había mantenido activa su dinámica, y una enérgica participación vecinal en múltiples proyectos barriales. Esta consolidación tiene como motor el empuje de Ignacio Leguizamo y el acompañamiento ineludible de Fabio Márquez, el paisajeante. Y así nos encaminamos al debate del CUR nuevamente, con el proyecto de ampliación de APH Abasto como un ajuste necesario en la revisión abierta durante el 2024.
El proyecto fue tomado por la legisladora Delfina Velazquez (UxP), y nos recibió el Presidente de ese Bloque, Juan Pablo Modarelli, junto a Paloma Garay Santaló, asesora y Consejera del Plan Urbano Ambiental, y María Suarez fueron un apoyo fundamental a la hora de analizar los vericuetos de tratamiento parlamentario.
La propuesta también fue acompañada por la Junta Comunal de la Comuna 3, aunando en este apoyo a distintos espacios políticos y bloques. Fueron fundamentales para la ampliación del APH los apoyos de Julieta Pérez, de Juntos por el Cambio y de Inés Fornassero (UxP).
Participamos de todas las instancias, reunión de Asesores en Comisión de Planeamiento, reunión de Legisladores en Comisión de Planeamiento, Audiencia Pública, reunión de asesores en Comisión de Patrimonio, y en reunión de Legisladores. También fue clave mantener reuniones con los Comuneros previo a su participación en la Comisión de Planeamiento, junto a los Legisladores. Hablamos en todas y cada una de las instancias. Era necesario expresar nuestra propuesta a todos los actores.
Y así fue como pudimos lograr que se incorporara una parte del proyecto de ley (no todo lo presentado por nosotros), entre las modificaciones del CUR votado en diciembre de 2024. El APH 32 - Mercado de Abasto y su entorno, agregó 10 manzanas al área protegida. Nuestra propuesta era proteger un área más amplia que la aprobada, así como fortalecer las restricciones de alturas para evitar que se estimulen demoliciones, con mayor empeño.
De forma complementaria a la protección por áreas, la actualización del Código Urbanístico incluyó en 2024 la catalogación definitiva de listado de Inmuebles que protege algunas edificaciones de forma individual. La propuesta aún se encuentra en revisión parlamentaria (abril 2025), y tiene por finalidad dejar atrás el catálogo preventivo que rige sobre los inmuebles construidos hasta 1944 para confirmar un catálogo definitivo de inmuebles con protección patrimonial. La mayoría de los 31 inmuebles a proteger en el barrio del Abasto que propone el GCBA, surge de lo solicitado por el proyecto de Cultura Abasto a partir de sus relevamientos vecinales (tanto para los inmuebles que se encuentran dentro del polígono como fuera del APH). Si bien el listado en tratamiento no resulta suficiente, la protección del Abasto logró otro paso más en su proceso de consolidación como paisaje cultural.
Agregamos a esta nota el plano del APH y el listado de inmuebles a catalogar (que se encuentra aún en debate parlamentario). Sin dudas estos dos instrumentos requieren de otras líneas de acción para resguardar el patrimonio intangible y la cultura barrial que hace a su identidad.
Con Cultura Abasto, en el mientras tanto, realizamos eventos tales como caminatas y mapeos, en respaldo al trámite parlamentario del proyecto y para dar difusión del mismo.
Consideramos que se ha dado un importante paso en la protección de la identidad barrial con esta ampliación de la APH ABASTO, sin embargo insistimos con que debiera ampliarse el área aún más, en virtud al paisaje que rodea esta zona, incluyendo manzanas de la Comuna 5, que constituyen un paisaje consolidado, con casas bajas, con amplio reconocimiento del valor de proteger desde los vecinos, y de la lucha vecinal que se viene reiterando desde hace tiempo. Este desafío será la próxima etapa. Que no falta tanto.
Elisabet Mosconi*
*Cultura Abasto
ÁREA DE PROTECCIÓN HISTÓRICA
APH32 - Mercado de Abasto y su entorno.
Para conocer los detalles de la normativa del área de protección histórica del Abasto, ver el Anexo II - Áreas Especiales Individualizadas del Código Urbanístico - Pág. 228 en el siguiente Link: https://buenosaires.gob.ar/sites/default/files/2025-02/cur-anexoii.pdf
INVENTARIO DE INMUEBLES CATALOGADOS - ÁREA ABASTO:
Catalogación en tratamiento legislativo, con aprobación definitiva pendiente.