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Diego Cabot
En el Estado hay un Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat y, obviamente, una ministra, María Eugenia Bielsa. Ejerce su cargo en un país en el que hay un problema que se agrava: la toma de tierras. En la Argentina hay una ministra ausente en un debate cada vez más presente.
No se conocen exactamente cuáles son los planes de Bielsa ante las crecientes tomas en todo el país. Ese no sería un problema si el ministerio que dirige hubiese llevado a cabo políticas activas. "Mejor que decir es hacer; y mejor que prometer es realizar", se le atribuye haber dicho a Juan Domingo Perón. Pero el punto es cuando no se dice ni se hace.
Una manera difícil de refutar para medir el "hacer" en la Administración Pública es mirar la ejecución del presupuesto. Según un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP), que recopila cómo se gastó el dinero asignado hasta fines de julio, el ministerio de Bielsa apenas ejecutó el 31,1% del cheque que tenía asignado. Habían pasado entonces siete meses del año y el indicador de ejecución teórica, es decir el nivel aceptable, estaba en el 56,6%.
La lentitud llama la atención, ya que otros ministerios que incrementaron su demanda por la externalidad de la pandemia -este sería el caso de Desarrollo Territorial- ejecutaron mucho más gasto. Seguridad, por caso, se había consumido el 68,7% en el mismo período; Producción, 85% o Trabajo, 74,7%.
Si la lista de los que menos gastaron se invierte surge que el que menos crédito utilizó es el Ministerio de Turismo, con apenas 20,7% en siete meses. Matías Lammens, afectado claramente por la desaparición durante este tiempo de la actividad, canceló todas las propuestas de fomento. Entendible. El 31% de ejecución de Bielsa, en el contexto de las tomas, deja más dudas.
Pero más allá de que el informe, siempre confeccionado con datos oficiales, llega hasta julio, LA NACION consultó la ejecución en línea que presenta la Secretaría de Hacienda del Ministerio de Economía. Según los datos oficiales, Bielsa tiene créditos para consumir en políticas de vivienda y hábitat por 38.261 millones de pesos, pero hasta ayer utilizó 12.384 millones.
¿Qué significa esto? Que sólo ejecutó 32,37% del total. Y significa algo más. Que entre agosto y lo que va de septiembre, los meses críticos de las tomas en todo el país, el ministerio apenas ejecutó 1,3% del total.
La parsimonia presupuestaria que exhibe la ministra se puede ver en otras partidas. Las transferencias de capital, que son las partidas que van destinadas a la inversión, para Infraestructura urbana cayeron desde 88% en julio de 2020 en comparación con el mismo período de 2019 en términos nominales. Por ese rubro se invirtieron 613 millones de pesos (un 7,4% del total asignado), 4597 millones de pesos menos que el año pasado.
Para inversión de vivienda y urbanismo, siempre en términos nominales y con una inflación cercana a 50%, el cheque fue de 863 millones de pesos (13,6% de ejecución), 2616 millones -o 75,2%- menos que el año pasado.
Pero no solo presupuestariamente podría mirarse la gestión de Bielsa. La semana pasada, LA NACION publicó una nota en la que se narraba la queda de varios intendentes (muchos de ellos del PJ), por la ausencia de la ministra en el territorio. Los jefes comunales dicen que "no activó" ninguna medida como respuesta al conflicto por las tomas y reconocen que el ministerio, creado tras la asunción de Alberto Fernández al poder, carece de estructura.
"Yo no le conozco la cara, la tengo que googlear para ubicarla", le dijo a LA NACION el referente de un municipio donde las tomas de tierras provocan dolores de cabeza desde hace casi dos meses.
El hecho de que Bielsa no acuda a las zonas en conflicto se interpreta, desde la visión territorial de los intendentes, como un síntoma de desinterés. Poco parece importar que el manejo operativo de las crisis dependiera de la provincia, donde ya intervinieron distintos actores, desde el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, a la ministra de Gobierno, Teresa García, pasando por los ministros de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque; de Seguridad, Sergio Berni; de Infraestructura y Servicios Públicos, Agustín Simone; y de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak.
"No avalamos la toma de tierras, no creemos que sea el camino", sostuvo Bielsa la semana pasada, al hablar con la prensa tras una reunión de trabajo del gabinete de Planificación Urbana y Hábitat, en Casa de Gobierno. La funcionaria dijo en ese momento que el Gobierno nacional tiene "una respuesta para poder resolver en el corto, mediano y largo plazo el tema de los 4000 barrios populares". A comienzos de agosto, Bielsa había identificado las tomas con "situaciones delictivas".
No hubo más palabra públicas hasta ayer. "No hay ninguna razón para que el metro cuadrado esté vinculado al dólar", afirmó Bielsa en una videoconferencia ante la Comisión de Infraestructura y Vivienda del Senado. Bien vale una pregunta: ¿venderá su casa en pesos?