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Sociedad . Por Luis Otero
12 de abril 2022
El cuento del soterramiento que nunca se terminó: un drama que afecta a decenas de miles de personas de un lado y del otro de las vías del ferrocarril.
Hace poco, el día 16 de marzo, la gente quiso linchar a un joven que pasó la vía en Castelar con las barreras bajas, justo cuando venía el tren. A las 18 del 16 de marzo, en la barrera de la calle Zapiola, en la hora pico, harto de esperar cruzó la barrera y justo venía el tren con destino a Moreno.
El tren paró, la gente se bajó y casi linchan a quien trataba de rescatar su autito negro de las vías mientras la gente le mostraba su indignación.
La sacó muy barata. Pudo ser una tragedia, como las que se asoman todos los días en cada paso a nivel de las vías, una modalidad de cruce de vías del tren que ya ha sido abandonada en casi todo el mundo, pero en las vías del Sarmiento parece que no se aprende todavía (con perdón de don Domingo).
Basta recorrer la zona escuchando a los automovilistas, los vecinos y los peatones, para darte cuenta de que es exasperante para cualquiera los que pasa cuando te toca cruzar la vía de un lado o del otro, y que en un momento la imprudencia aflora como único remedio para el resultado de la mala praxis, la improvisación y la indolencia. Que no son de ahora.
Soterramiento del Sarmiento: más de 120 años para una obra
Porque el soterramiento del Tren Sarmiento, es una idea no ejecutada que viene desde 1901. Mucho ¿no? Demasiado para seguir prometiendo soluciones que no terminan de llegar.
La gente quiere la solución ya y eso es lo que reclama. Me tomé el trabajo de vivir la experiencia, y cuando fui a hacer la nota para Mediodia Noticias (eltrece) crucé con el auto las vías. Media hora a las 16:45. Y lo que vi después fue una experiencia parecida para la gente, con barreras que se laventan por momentos sólo un minuto y medio. Te saca del eje si estás apurado la espera absolutamente innecesaria que se come tu tiempo de manera lastimosa. Sin justificarlos, a los que esperan una señal del guardabarreras (cuando está) los terminás entendiendo.
“Casualmente”, antes de que llegara con la cámara para registrar lo que pasaba en el lugar conforme los vecinos nos habían denunciado, no había dos guardabarreras. Ni barreras adicionales, ni personal ferroviario colocándolas. Pero después de mi llegada, aparecieron todos.
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Nos fuimos al cruce de la estación, que está a 4 cuadras, y ahí no había guardabarreras, los autos pasaban con la barrera baja y la cola de autos tenía cuatro cuadras.
Son hechos actuales, es maltrato, de muy larga data, y que exigen más celeridad en el manejo de los nuevos proyectos que dicen que están ejecutando, mientras la tragedia ronda las vías.
El viernes 8 de abril anduvo rondando por Merlo, en el cruce donde casi muere toda una familia atrapada en el auto que manejaba el padre de familia, un inconsciente que puso a todos su seres queridos al borde de la muerte, pero afortunadamente terminaron parando en la “estación milagro”, porque cuando ves las imágenes no podes pensar en otra cosa.
Las barreras del Sarmiento: el riesgo lo asumen los vecinos
El soterramiento del Sarmiento fue abandonado por el gobierno de Alberto Fernández, porque 3000 millones de dólares es un dinero que no tenemos en estos tiempos de crisis.
Antes de eso, las obras fueron reinauguradas 12 veces, por todos los gobiernos. Parte se ejecutó, pero los 15 km que faltan van a ser reemplazados por puentes, y pasos bajo nivel.
Los trenes pasan cada ocho minutos en hora pico y la solución por ahora no es agilizar el tránsito de un lado al otro, sino poner más trabas para evitar accidentes. Una de ellas es la colocación de divisores para evitar que los autos hagan el zigzag para eludir las barreras. Aplicar fotomultas para sancionar la infracción que implica cruzar con barreras bajas.
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La eliminación de los pasos a nivel es una meta que se impuso el estado, paro viene tardando un poco en realizarla. Restan construir, según los funcionarios, 11 puentes de los 15 en total que quieren aportar .
Cada obra tarda mínimo 6 meses, también hay obras de paso bajo nivel que se proyectan para dejar los pasos a nivel definitivamente en la historia.
Mientras tanto, el riesgo que debe ser asumido y que causa mucho daño.
Es la corrupción la que viaja en ese tren.
Un proyecto que tiene 121 años, pero que nunca se terminó, es tan añejo como la corrupción que sobrevuela y atraviesa la historia. La Tragedia de Once lo mostró con claridad meridiana.
La causa judicial por las coimas por el soterramiento está esperando un procesamiento .
De Vido, Jaime, Calcaterra y otros actores esperan la decisión del juez Marcelo Martìnez de Giorgi, que tiene el pedido del Fiscal Franco Piccardi para procesar por sobornos a los nombrados. ¿Pruebas? Hay incluso un depósito en una cuenta de andorra que nadie puede explicar. Las pruebas llegaron también del Brasil, con Odebrecht (te suena, ¿no?) en el medio.
Pero la causa hoy está esperando. Nuestro deseo es que no duerma el sueños de los justos. Eso no será justicia, y otra vez a la corrupción le habrán dado vía libre.