29/12/2020 | Clarín
Era el único oferente de los tres originales que seguía en carrera. El contrato puede extenderse tres años más y estipula un cambio tecnológico.
Sebastián Clemente
Con dos años de retraso, varias prórrogas por la concesión del servicio en los últimos años, y una contienda que terminó con uno solo de los tres oferentes originales, el actual operador del subte porteño, Metrovías, seguirá al frente del servicio por doce años más, con opción a una prórroga de otros tres.
"El Directorio de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) aprobó este martes, mediante la resolución N° 3382/2020, la adjudicación del nuevo contrato de concesión del servicio al Grupo Benito Roggio - Metrovías", expresaron a través de un comunicado. El nuevo contrato entrará en vigencia dentro de los 90 días posteriores a la publicación en el Boletín Oficial. Algo que, según trascendió, ocurrirá en los primeros días del próximo año.
La noticia se dio a conocer a solo dos días del final de 2020, y ante la inminencia de una nueva prórroga en la concesión.
Como se anunció cuando se lanzó el proceso de licitación, el nuevo contrato prevé inversiones en materia de infraestructura y la incorporación de nuevas tecnologías "orientadas a brindar un mejor servicio a los usuarios y usuarias de la red, y a lograr una relación más cercana entre ellos y la empresa", expresó Sbase a través del comunicado difundido este martes cerca de las 18.30. Según había publicado Clarín a fines de 2019, Metrovías había comprometido una inversión de alrededor de 150 millones de dólares.
Además, entre otras de las novedades del nuevo vínculo figura una cláusula que estipula que, "si la empresa no cumple con el servicio pautado, no recibirá el pago correspondiente. Es decir, se remunerará en base al indicador coche/kilómetro comercial (CKC), esto es, el servicio efectivamente prestado". Se informó el valor que figura en la oferta es $125,6 /CKC.
Los doce años de contrato pueden ser ampliados a tres más según estipula el nuevo contrato. Metrovías tomó el control del servicio el 1° de enero de 1994, tras un proceso de privatización que había comenzado en 1989. Todavía el subte era controlado por el Estado nacional, hasta que en 2013 comenzó fue traspaso a la órbita del Gobierno porteño. Como el actual proceso licitatorio se demoró, el Ejecutivo estableció varias prórrogas en los últimos años.
"Estamos muy satisfechos con nuestra participación en el proceso licitatorio, en el que enfrentamos con éxito a dos poderosos consorcios internacionales", expresaron desde Metrovías, y agregaron: "Este nuevo contrato por los próximos 12 años representanta un enorme desafío y nos brinda previsibilidad a futuro para encarar una nueva etapa de mejora y modernización del servicio".
Entre otras cláusulas del contrato, según informó Sbase, desde ahora el operador pasará a hacerse cargo de "los gastos resultantes de las revisiones generales del material rodante, y se prevé un incentivo por incremento de la demanda de pasajeros producto de su gestión".
El subterráneo porteo será operado por Metrovías durante doce años más.
La licitación
El proceso licitatorio comenzó en 2018. Se presentaron las empresas RATP (subsidiaria del Metro de París) junto con Alstom, Keolis, con Transport for London y Corporación América, y Metrovías, que tiene como asesor técnico a la alemana Deutsche Bahn.
Mientras el proceso de licitación sufría demoras, la economía argentina se deterioraba. Fue así que primero la empresa parisina, y luego Keolis, anunciaron que abandonaban la contienda. La primera lo hizo en 2019 y la segunda este año.
Inversiones comprometidas
Con el nuevo contrato, el operador está obligado mejorar la calidad del servicio. Según se anunció en pleno proceso licitatorio, esto implica inversiones en tecnología.
La renovación está pensada también para el mantenimiento del material rodante y la señalética, entre otros factores clave de la operación del servicio. Así, en un proceso que se desarrollará durante los próximos años, se podrá tener noción del desgaste de escaleras, ascensores, trenes, vías e instalaciones, y efectuar el mantenimiento antes de que salgan de servicio.
En ese sentido, la empresa también deberá implementar un nuevo sistema de información al usuario que permitirá brindar datos en tiempo real ante alteraciones del servicio. Para esto, se digitalizará la operación a nivel tráfico, automatizando algunos de los mensajes que debe dirigir el conductor o guarda al público usuario.
Así, entre las propuestas destinadas a los pasajeros está la de la creación de una nueva app que, además de contener información básica como los horarios del próximo tren, estado de los medios de elevación y frecuencias, incorpore nuevas funcionalidades como libro de quejas online, información general de la red y atención en línea, entre otras.
SC