Radiografía conurbana: el mapa de las urgencias en los barrios populares bonaerenses

por MATÍAS COLOMBATTI  El destape  26 DE SEPTIEMBRE, 2021

Un relevamiento realizado por la Universidad Popular Barrios de Pie en el conurbano bonaerense ofrece un diagnóstico sobre todas las problemáticas que agravó la pandemia en los barrios populares de la región más poblada del país.

El diagnóstico es tan duro como esperable en el camino de salida de una pandemia que agravó todas las problemáticas en los barrios humildes, como la crisis alimentaria y sanitaria, las situaciones de violencia hacia las mujeres, consumos problemáticos de drogas, la seguridad, el incremento de casos relacionados con problemas de salud mental, el déficit habitacional y el deterioro de las condiciones ambientales.

Un relevamiento presencial realizado por la Universidad Popular Barrios de Pie en el conurbano bonaerense y ofrece un mapa de las urgencias en la región más poblada del país.

El informe estuvo dirigido por Daniel Menéndez, coordinador nacional de la organización y sociólogo, además de candidato a diputado nacional por el Frente de Todos. “Este trabajo intenta hacer un diagnóstico profundo de lo que sucede en los barrios populares para pensar cómo superar la crisis y diseñar salidas posibles que van a tener una vez más a las organizaciones sociales como motor fundamental”, dice a El Destape.

¿Cuáles son las principales conclusiones? “En cuanto a vivienda aparece la irregularidad en la tenencia de la tierra como un elemento muy claro. Mucha gente es propietaria pero no tiene escritura de la casa. Los operativos del RENABAP para extender el certificado de vivienda familiar están empezando a solucionar este problema”, señala Menéndez.

Además, en relación a la educación y la conectividad, el trabajo muestra que “casi la mitad de los vecinos tienen una conexión a internet entre mala y regular. La mayoría de las familias accede a la virtualidad mediante datos móviles o con una conexión a wifi deficiente”.

Y con respecto a la salud, el acceso al sistema sanitario es “una problemática fuertemente agravada durante la pandemia. Un número mínimo de gente en los barrios tiene cobertura de obra social y más de la mitad de los encuestados revelaron que no se hicieron ningún control de salud en el último año”, finaliza el dirigente social.

El estudio es representativo ya que ofrece información de 13.102 casos relevados por 1.200 encuestadores de forma presencial.

Datos del diagnóstico integral sobre los problemas de los barrios populares bonaerenses

Hábitat, movilidad y vivienda. La falta de recolección de basura (23.1%) y de alumbrado público (20.5%), seguido por la falta de cloacas (18.6%) y de veredas en buen estado (17.8%) son los problemas más mencionados por las personas encuestadas. La falta de agua y de luz (10.5% y 9.5%, respectivamente), indica que un 20% de los casos carecían de servicios básicos.

El acceso al transporte público y a la peatonalidad es otro de los principales problemas, y que se asocia a la seguridad de las personas que viven en los barrios populares. Las paradas de colectivos alejadas de las viviendas (16.8%) y colocadas en emplazamientos percibidos como inseguros (19.5%) son identificadas como limitaciones que impactan en la movilidad.

También advierten por la falta de veredas (17.8%), un problema que se agrava los días de lluvia debido al barro (17.4%), al que se le suma el miedo a ser víctimas de algún delito debido a la falta de alumbrado público (20.5%).

En ese punto, indicado en el informe como “la sensación de temor referida a circular por la calle”, un altísimo porcentaje, el 85.8% de las personas, indicó que le resulta difícil caminar por la noche y el 77.5% considera difícil dejar que los niños y niñas realicen actividades sin la supervisión de un adulto, ya sea ir a hacer mandados, volver de la escuela o jugar en la calle.

Sobre la continuidad pedagógica, mientras el dictado de clases alternó la presencialidad y la virtualidad, casi la mitad dijo disponer de una conexión a internet entre mala y regular (46.1%), situación que se agrava cuando la mayoría de las familias accede a la virtualidad mediante datos móviles (38.6%) o con una conexión a wifi deficiente (32.6%), y desde un celular compartido entre los miembros del hogar (44.9%).

Un dato que preocupa es que al menos un 22.9% de los encuestados dijo conocer al menos a un niño, niña o joven que se desvinculó de la escuela durante la pandemia. Además, el informe advierte por la falta de instituciones educativas destinadas a las primeras infancias. El 62.2% afirmó que en su su barrio no hay jardines maternales.

“Debido a que el contexto post pandemia dejó muy claro los problemas de conectividad en los barrios populares es central declarar la emergencia digital y avanzar en una política integral de distribución de dispositivos tecnológicos, garantía de puntos de conectividad y desarrollo de infraestructura para que llegue Internet a todos los vecinos, con el objetivo de acompañar a la escuela para que no se interrumpa el vínculo pedagógico y nadie se quede afuera”, señala Menéndez.

Otra característica distintiva de los barrios populares, con fuerte impacto en el acceso a servicios públicos, y que ubica en una situación de vulnerabilidad a las familias que enfrentan la posibilidad de ser desalojadas, es la irregularidad en la tenencia de la tierra donde viven.

Aunque el 65% de los hogares encuestados manifestaron ser propietarios de su vivienda, el 41.3% no posee ningún documento formal que acredite la titularidad. El número viene en descenso, según señala el informe, a medida que avanzan los operativos del Registro Nacional de Barrios Populares (RENABAP) que permitieron regularizar la situación dominial del 22.7% de los hogares.

En relación al ambiente, el 23.1% destacó la falta de recolección de basura como uno de los principales problemas ligados a los servicios públicos. La gestión de los desechos aparece como un problema preponderante en los barrios populares, con la presencia de basurales y microbasurales (78.6%), la proliferación de roedores (77.5%) y la existencia de agua estancada en recipientes, botellas, tachos o entre la basura (77%).

El acceso al sistema sanitario es otra problemática agravada durante la pandemia. El relevamiento destaca que solo el 13,6% tiene cobertura de obra social, y en el 61,4% de los casos consultados no se hicieron controles de salud en el último año.

“La dificultad en el acceso a la atención médica y a los necesarios controles impacta en el desarrollo de enfermedades crónicas, causantes del 73,4% de las muertes en nuestro país, como refiere la 4ta Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) del año 2018 llevada adelante por el Ministerio de Salud”, advierte el informe.

Frente a los datos que arroja el estudio, aparecen también los desafíos y las políticas públicas pendientes. Menéndez agrega que es necesario “de manera rápida poner en marcha nuevamente un plan de fortalecimiento del primer nivel de atención médica. Debemos generar espacios de coordinación con las organizaciones sociales para garantizar el acceso de aquellos que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad y para poner en marcha estrategias comunitarias que permitan complementar la lógica de atención individual con espacios colectivos”.

Por último, el dirigente advierte que se debe “revisar la situación de la cobertura de los cientos de miles de trabajadores de la economía popular, ya que los que cuentan con monotributo social, a pesar de realizar aportes mensuales, en general encuentran fuertes trabas burocráticas para tener el alta en las obras sociales”.

“Cuando en 2019 asumimos la gestión del país nos encontramos con dos pandemias. La primera, la del covid, que generó una crisis alimentaria y sanitaria, agudizó las situaciones de violencia de género y de inseguridad, y fue dejando un deterioro general en las condiciones de vida. Pero a esta situación hay que agregarle la otra pandemia que ya arrastrábamos, la que dejó el gobierno macrista y la administración de Juntos por el Cambio en todo el país, especialmente en los barrios populares de la provincia de Buenos Aires” explica Menéndez a El Destape.

“Frente a esta situación, toda la organización comunitaria, la militancia popular, le pusieron el pecho a estos tremendos problemas y lograron no solo alivianar los costos de ambas pandemias, sino que además pudieron sostener y contener el funcionamiento de lo social”, finaliza el sociólogo y candidato a diputado nacional.