VIERNES 12 DE ENERO DE 2018| Valeria Vera | LA NACION
Lo advierten especialistas consultados sobre los ejes de la gestión porteña
Reacciones y valoraciones dispares encontró LA NACION entre especialistas consultados sobre los objetivos de gestión definidos por la Ciudad y sus alcances.
"Es de valorar el esfuerzo que realiza el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en resolver grandes temas urbanos pendientes; algunos discutidos durante décadas, como la autopista ribereña y la urbanización de la villa 31 y del barrio Papa Francisco, lindero a la villa 20. En el mismo sentido, se destaca la decisión de sostener operaciones de espacio público de calidad, de movilidad colectiva o sustentable con bicisendas o las áreas de prioridad peatonal", ponderó Marcelo Lorelli, arquitecto y codirector de la Maestría en Ciudades de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
No obstante, planteó que las políticas urbanas mantienen una deuda importante con los sectores del sur porteño. "El tan deseado equilibrio entre el norte y el sur es todavía un asunto pendiente. La calidad de los servicios urbanos está claramente diferenciada entre un lado y el otro de la traza de la autopista 25 de Mayo -advirtió-. Se da en todos sus ítems, desde la intervención de los espacios públicos, pasando por el alumbrado de sus calles y hasta la recolección de residuos. Alcanza con recorrer algunos barrios, como Mataderos, Lugano o Soldati, para ver que hay vecinos más favorecidos que otros".
Eduardo Reese, director del área de Derechos Económicos, Sociales y Culturales del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), prefirió concentrarse en un puñado de compromisos. Sobre el mapa del delito, consideró "positivo que se produzca información criminal y sea de acceso público", pero "hay que tener en cuenta que si solo analiza la cuestión en forma lineal, a partir de variables como delito/georreferenciación y de las zonas calientes, puede derivar en la estigmatización de barrios y grupos sociales".
En cuanto a los proyectos con participación ciudadana, indicó: "El programa BA Elige, concretamente, refuerza la centralización de decisiones y desconoce las competencias y el funcionamiento legal de las comunas. Lo que en verdad debiera ser un compromiso de gobierno es fortalecer a estas últimas, estableciendo para ellas un fuerte programa de presupuesto participativo descentralizado, que garantice el debate democrático y la planificación y gestión a escala barrial".