Clarín | por Pablo Novillo
La Legislatura porteña aprobó otra prórroga, hasta fin de año. La obra para llevarlo a Cañuelas se había demorado por la pandemia. Pero el cambio de sede está pendiente desde 2001.
Está pendiente desde 2001 y deberá esperar unos meses más. La mudanza del Mercado de Hacienda sufrió otra demora, la N° 12. Aunque esta vez se debe a un verdadero motivo de fuerza mayor: la pandemia de coronavirus. La Legislatura porteña aprobó este jueves una nueva prórroga para que el complejo siga estando en Mataderos al menos hasta fin de año, mientras se termina la obra de su nueva sede en Cañuelas.
Así, se vuelve a demorar el plan para urbanizar el terreno actual en Mataderos, con viviendas, un polo gastronómico e instalaciones públicas.
El proyecto fue sancionado con 55 votos a favor y 4 abstenciones. El plazo, que vencía en julio, se estiró hasta el 31 de diciembre.
El Mercado de Hacienda es manejado por una sociedad compuesta por consignatarios. En 2018, compraron un predio de 100 hectáreas junto a la ruta 6, en Cañuelas, y empezaron el proceso para armar el nuevo mercado, más grande y moderno. Pero en marzo tuvieron que frenar las obras por la llegada del coronavirus. Las pudieron retomar el mes pasado, con la expectativa de inaugurar el complejo a fin de año.
Pero como es imposible cerrar aún el predio de Mataderos, porque desde allí sale la mayor parte de la carne que se consume en la Ciudad, los legisladores tuvieron que dar otro prórroga más, de lo contrario el Mercado hubiera quedado legalmente inhabilitado para operar.
Se trata de un nuevo capítulo en la larga historia de demoras. El Mercado de Hacienda fue creado en 1901 y privatizado en 1992. Siempre funcionó en el terreno de 32 hectáreas entre Lisandro de la Torre, Eva Perón, Murguiondo y Directorio. Pese a que muchos lo conocen como "Mercado de Liniers", en realidad queda en Mataderos.
En 2001, la Legislatura porteña sancionó una ley para "prohibir el ingreso de ganado en pie" a la Ciudad. El objetivo era lograr la mudanza del Mercado para recuperar el predio e integrarlo al tejido urbano de Mataderos.
La siempre difícil situación económica y la falta de empuje político en algunos casos permitieron que la mudanza nunca se concretase. Y además había un problema muy concreto: encontrar una nueva ubicación.
Tras años de demoras y prórrogas, en 2017 se firmó un acuerdo con el Mercado Central, para mudar la hacienda a parte de su terreno. Pero Verónica Magario, por entonces intendenta de La Matanza, bloqueó la iniciativa en la Justicia.
Luego hubo un intento por llevar el mercado a un predio en Ezeiza, que tampoco prosperó. Finalmente, apareció la opción de Cañuelas.
Por lo pronto, habrá que seguir esperando para que comience el verdadero cambio en el barrio: la urbanización del terreno de Mataderos. El plan, ya votado, incluye la construcción de edificios de viviendas en el 35% de la superficie, y la integración del 65% del suelo al espacio público.
Además de apertura de calles y espacios verdes, la idea es construir una escuela, un polideportivo y otras instalaciones públicas.
Pero la gran novedad está en el concepto de armar en el lugar un "polo de la carne", con restaurantes, parrillas y hasta un museo.
La Recova del Mercado, un símbolo de Mataderos.
Además, se sumarían una pista para pruebas de destreza con caballos y más espacios que serían aprovechados por la histórica feria tradicional gauchesca, que antes de la pandemia convocaba a cientos de personas todos los domingos.