Diario Popular
nirán la Ruta 3 con la autovía que une Ezeiza con Cañuelas y 20 de Junio con Mariano Acosta. Estará concluida en 2023, y permitirá unir la Panamericana con la Ruta 2.
En poco más de 2 meses, se inaugurarán dos tramos separados de 17 kilómetros de la autopista que permitirá unir la Panamericana y la Ruta 2, que beneficiarán a vecinos del distrito: por un lado unirá a la localidad de 20 de Junio con Mariano Acosta, en el vecino distrito de Merlo, y por el otro, el kilómetro 38 de la Ruta 3 -en el barrio Esperanza- con la Autopista Ezeiza-Cañuelas.
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Se completará en 2023
Cuando esté finalizada -se estima que en 2023- se constituirá en una alternativa al Camino de Cintura y a la Ruta Provincial 6, aunque contará con peaje, cuyo valor será similar al de las otras vías del área metropolitana, como el caso de la Autopista del Oeste, donde recorrer los poco más de 50 kilómetros que separan la avenida General Paz de Luján obligan a desembolsar más de 100 pesos.
Empero, los flamantes tramos podrán ser utilizados gratuitamente. El que unirá la Ruta 3 con la Autopista Ezeiza-Cañuelas -de 7 kilómetros- aparece como muy beneficioso para el distrito, y si bien se encuentra a poca distancia de la vinculación inaugurada años atrás a través de las calles Molina y Blas Parera, el hecho de que se desarrollan por la trama urbana del barrio San Pedro obliga a circular a no más de 40 kilómetros, mientras que por la autopista la máxima será de 100.
En tanto el que vinculará Mariano Acosta con 20 de Junio -de 10 kilómetros- permitirá a la localidad matancera tener por primera vez en su historia un segundo acceso pavimentado, ya que el único hasta ahora es a través de Pontevedra, en el vecino distrito de Merlo. Por la autopista se podrá empalmar en Mariano Acosta con la Ruta Provincial 48, y a través del Camino de la Ribera llegar a la Autopista del Oeste.
Los restantes tramos no están terminados porque hay que realizar numerosas expropiaciones y obras significativas, como el cruce sobre la Ruta Provincial 7 y las vías de la Línea Sarmiento en Merlo, junto al Río Reconquista, en una zona muy urbanizada.
La idea de extender el Camino del Buen Ayre fue lanzada por los entonces ministro de Economía Domingo Cavallo y gobernador Eduardo Duhalde en 1996, y dos años después fue adjudicada la obra a una empresa mexicana y otra argentina. No se concretó, y la crisis de 2000 abrió un paréntesis hasta 2005, cuando se firmaron sucesivos acuerdos con una firma alemana y una canadiense.
Pero fue recién en 2009 que se la volvió a licitar, y en 2010 se iniciaron las obras, que avanzaron con lentitud, hasta que fueron reactivadas en los últimos años.