Índice Construya: la venta de insumos para la construcción se desplomó 32% anual en junio
Las empresas líderes en la fabricación de artículos para la construcción destacaron la mejora respecto de mayo. Sin embargo, desde enero que se verifican fuerte derrumbes anuales. Ámbito, Tiempo Argentino, Página 12, Infobae
Infobae ECONOMÍA
Por Mariano Zalazar
Por la crisis del sector, hay 4.465 constructoras menos en actividad que el año pasado
El freno de la obra pública y la baja actividad en el sector privado llevaron a que miles de compañías de todo el país frenaran temporal o definitivamente su actividad.
La industria de la construcción atraviesa una crisis profunda que se refleja en la reducción significativa del número de empresas activas. Según los datos más recientes publicados por el Instituto de Estadísticas y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), el sector registró una disminución de 4.465 constructoras activas en comparación con el año pasado.
En detalle, en abril de 2023 había 22.238 empresas constructoras operativas. Un año más tarde, en abril de 2024, ese número ha disminuido a 17.773, lo que refleja una caída del 20%.
La paralización de proyectos de infraestructura y construcción financiados por el Estado, sumado a la baja actividad en el sector privado, ha dejado a muchas empresas sin contratos ni ingresos, forzándolas a cerrar o reducir drásticamente sus operaciones. Esto, por supuesto, ha repercutido también en el nivel de mano de obra, que se viene achicando mes a mes. De acuerdo a los últimos valores procesados por el Ieric, el sector perdió 88.410 empleados formales en los últimos doce meses, a los que se suman varias decenas de miles de empleos informales. “Se calcula que más de 100 mil personas se quedaron sin trabajo por el fin de la obra pública”, aseguraron fuentes vinculadas al sector.
Qué empresas salieron del radar
El hecho de que una empresa constructora deje de estar en actividad, no implica necesariamente que haya cesado definitivamente sus operaciones, pero sí indica que no está desarrollando ninguna obra en ningún lugar del país. Hecha esta aclaración, se puede analizar con mayor detalle lo ocurrido a nivel sectorial.
De acuerdo con el Ireic, de las 22.238 constructoras actividad que había el año pasado, 14.296 eran constructoras, 5.902 eran contratistas y 2.040 subcontratistas. Entre las constructoras, 3.863 eran personas físicas, 187 sociedades de personas, 3.593 S.A., y 5.036 eran S.R.L. Las 1.617 restantes se incluyen en el rubro “otros”.
Ahora bien, entre las 17.773 que están inscriptas este año, sólo 11.266 son constructoras, 4.864 son contratistas y 1.463 subcontratistas. Entre las más de 11.000 constructoras, 3.305 son personas físicas, 2.908 son S.A., 3.782 son S.R.L. y 1.192 son “otras”.Pasando en limpio, dejaron de estar en actividad 3.030 constructoras, 1.038 contratistas y 397 subcontratistas. De las 3.030 constructoras que cesaron su actividad, 558 eran personas físicas, 108 sociedades de personas, 685 eran S.A., 1.254 eran S.R.L. y 425 estaban dentro del rubro “otros”.
Qué pasó a nivel regional
Otro dato que resulta interesante de analizar, es qué pasó en las principales provincias argentinas durante el último año, hablando por supuesto de la cantidad de empresas constructoras activas. Según los datos publicados por el Ieric, en provincia de Buenos Aires había 6.226 firmas en actividad en abril del año pasado y este año el número disminuyó a 4.858 (1.368 menos). También disminuyó significativamente la actividad en CABA, que pasó de 4.416 a 3.428 compañías activas en el período analizado.
Santa Fe, por su parte, perdió 289 empresas en el último año, pasando de 2.149 a 1.860 compañías activas, de acuerdo a los datos publicados por el Ieric. La tendencia fue similar en las provincias de Córdoba (cayó de 1.692 a 1.302) y Mendoza, que decreció de 777 a 611 firmas constructoras.
Ni siquiera Neuquén, que mantiene un nivel de actividad alto de la mano de Vaca Muerta, ha podido mantener el ritmo de trabajo de las firmas constructoras. Los números relevados por el organismo indican que en esa provincia se perdieron 80 empresas en actividad (bajó de 651 a 571 compañías).
En resumen, la industria de la construcción en Argentina enfrenta una crisis severa, con una reducción significativa en el número de empresas activas y empleados. La paralización de proyectos financiados por el Estado ha sido un factor crucial en esta disminución, afectando a constructoras, contratistas y subcontratistas en diversas regiones del país.