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PuertoDeBuenosAires
Es administrado por el Estado nacional. Pero históricamente la ciudad de Buenos Aires reclama su traspaso. Se trata de una codiciada caja que hasta el propio Macri se negó a ceder.
El trasfondo de la disputa, que se reactivó tras el triunfo electoral del peronismo, es un mega negocio inmobiliario en predios ribereños.
Una pulseada en el nuevo escenario del poder
A partir del próximo 10 de diciembre, la Nación y la Ciudad de Buenos Aires volverán a estar dominadas por fuerzas políticas contrapuestas. Esta situación ya es motivo de recelos entre el PJ/kirchnerismo y el macrismo/larretismo, que ven amenazados sus intereses en numerosas áreas.
Una de ellas es la Administración General de Puertos (AGP) de Buenos Aires, un botín de 2.4000 millones de pesos anuales, de la cual dependen además los preciados terrenos que se extienden entre la Costanera Norte y la Ribera sur, con un valor estimado de hasta 10.000 dólares el metro cuadrado.
La batalla, para la cual algunos ya alistan los cañones, tiene como preludio inmediato la posición que Alberto Fernández exhibió durante la última campaña electoral.
Para el presidente electo, a pesar de su origen porteño, la Capital Federal es una ciudad rica (“que vive en la opulencia”) en un país con profundas carencias.
En el gobierno porteño, donde se concentrará el macrismo residual, muchos creen que esas palabras son un casi una declaración de belicismo político y que deberán estar preparados para lo que se les pueda venir.
Una pelea histórica
El puerto de Buenos Aires fue el único que quedó en la órbita del gobierno nacional, tras la descentralización de terminales y privatizaciones de servicios dispuestas en la década de los 90, durante la gestión menemista.
A partir de entonces, todos los gobiernos porteños reclamaron su transferencia, algunos con mayor énfasis que otros, pero todos sin éxito.
Lo curioso es que, tal como antes había sucedido con Fernando de la Rúa, Mauricio Macri lo exigió cuando era jefe de gobierno de la Ciudad, pero se negó a su traspaso cuando se convirtió en Presidente.
Su ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, prefirió retener la caja, el control de las licitaciones y todo el poder que deriva de ambas cosas.
La situación actual
El Frente de Todos acaba de dar el primer paso en contra de los intereses porteños. En ese sentido, la diputada nacional Fernanda Vallejos presentó la semana pasada un proyecto de ley para declarar al puerto “de interés federal”, un virtual cepo al traspaso.
Por otra parte, debido a la presión ejercida por la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina (FEMPINRA), dirigida por Juan Carlos Schmid, la AGP debió suspender la apertura de sobres correspondiente a la licitación que se encuentra en marcha para entregar las tres terminales a un sólo concesionario, por un plazo de 35 años y con opción a otros 15.
Ese trámite, mediante el cual se podría comprometer el control del puerto hasta el año 2069, estaba previsto para este lunes 2 de diciembre y fue forzosamente postergado hasta el 20 de marzo del año próximo.
La decisión fue adoptada en el marco de la fuerte sospecha que suponía concretar la apertura de sobres a apenas 8 días del traspaso de mando presidencial.
Las sospechas
Los rumores, echados a correr por el sector gremial, apuntaban a que la licitación está armada a la medida de una empresa de Singapur, presuntamente vinculada con el amigo presidencial y cónsul honorario Nicolás Caputo. “Era el firme candidato”, aseguraron a A24.com fuentes que conocen los profundos vericuetos portuarios.
Según las especulaciones, “Nicky” podría estar adicionalmente ligado al proyecto de desarrollo urbano en los predios que hasta hoy dependen de la AGP y que podrían ser desafectados con el fin de avanzar en un fabuloso negocio inmobiliario. El otro interesado, según las mismas versiones, podría ser el mismísimo primo de Macri, Angelo Calcaterra.
En el entorno del presidente electo, en estricto “off the record”, hablan de una encubierta intención del macrismo para vender la abandonada isla de Marchi, en el marco de un emprendimiento que se completaría con el proyecto previsto para la ex ciudad deportiva de Boca Juniors, conocido como Solares de Santa María. Sin embargo, advierten que los terrenos que podrían eventualmente tener el mismo destino son “muchos más”.
Sin estar en en ninguno de los dos frentes, el legislador porteño Sergio Abrevaya (GEN) es uno de los que reivindica el traspaso con mayor énfasis. “Macri transfirió la policía en apenas dos meses, luego de asumir la presidencia, y nunca accedió a hacer lo mismo con el puerto”, sostiene. Para este diputado porteño, autor de una flamante iniciativa para insistir con el reclamo de traspaso, “algo raro hay”.
No se descarta, por otra parte, que esta pelea termine en la justicia y pueda escalar hasta la Corte Suprema de Justicia, luego de un fallo del máximo tribunal que reconoció a la ciudad el “status” de provincia y daría pie a reivindicar el manejo del puerto propio.
Mientras tanto, también se encuentra pendiente la designación de los tres directores de la AGP, dos de ellos por la Nación y el restante en representación de la ciudad.
El puerto de Buenos Aires en números
- Tiene un presupuesto de $ 2.400.000.000 anuales
- Opera el 60% de la carga que llega a la Argentina en contenedores
- Recibe aproximadamente 800 buques de carga (oceánicos y barcazas) por año
- Recibe más de 625.000 pasajeros de cruceros por año
- La Administración General de Puertos tiene 444 empleados
- El sector denominado “Puerto Nuevo” comprende 6 dársenas y cuenta con 5 terminales de carga general, en una área de 92 hectáreas
- La Dársena Norte (ubicada entre las avenida Córdoba, Antártida Argentina y el Apostadero Naval de la Armada Argentina) tiene sectores concesionados a empresas como Buquebus y el Yacht Club Argentino.
- El sector denominado “Puerto Sur” ocupa 115 hectáreas
- 3 empresas operan las Terminales Río de la Plata (1,2 y 3), con vencimiento de la concesión previsto para 05/2020
- 2 empresas operan la terminal 4, que también cuenta con una prórroga de la concesión hasta 05/2020
- 3 empresas operan la terminal 5 (contenedores). Del mismo modo, la concesión vencerá en 05/2020
- La administración se divide en 7 sedes. Las oficinas centrales están ubicadas en la Avenida Ingeniero Huergo 431.