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Crisis habitacional
La Justicia dio luz verde para echar a unas 124 familias instaladas en la Villa Garrote.
Construcciones y terrenos en el barrio "Garrote", en Tigre.
En medio de los conflictos en distintas provincias del país por tomas de terrenos y predios ocupados, y tras el desalojo de Guernica que puso la crisis habitacional en la mira, una compleja situación en el distrito de Tigre podría llegar a una inminente salida decidida por la Justicia.
Se trata del barrio Almirante Brown, conocido como Garrote, donde una orden del juzgado de garantías número 2 de San Isidro ordenó desalojar a 124 familias que ocuparon diversas construcciones y terrenos.
La orden judicial se hará efectiva el próximo martes 17 de noviembre. De todas maneras, las autoridades del municipio de Tigre, de la provincia de Buenos Aires y de la Nación buscan llegar a un acuerdo con las personas que se encuentran en el lugar antes de que se cumpla efectivamente la fecha limite.
Las construcciones y terrenos en los que se encuentran las familias son del programa Sueños Compartidos, plan de viviendas de la Fundación Madres de Plaza de Mayo que terminó por interrumpirse debido a una causa judicial que investiga desvíos de fondos.
De las 124 familias censadas, un 40% se encuentran ocupando construcciones sin terminar. Según informaron fuentes oficiales al portal de noticias Qué pasa web, existe una auditoría de 2018 que indica que esas construcciones no pueden ser utilizadas y que existe peligro de derrumbe.
El resto de las familias se encuentran ocupando terrenos linderos a las construcciones.
La Justicia ordenó el desalojo de la toma en el barrio Garrote de Tigre.
“Estoy tomando este espacio pensando en mis hijos. Estamos viviendo con mis viejos, porque cuando tuvimos una casilla acá en el barrio, nos desalojó el Municipio. Vimos la situación y vinimos acá a meternos en un terrenito. Intentamos comprar y nos dijeron que no se podía. Estamos esperando hace años lo que nos prometieron que nos iban a dar y nunca llegó nada” dijo Julio, vecino del barrio Garrote y uno de los ocupantes junto a su mujer y tres hijos al portal de noticias de zona Norte.
El barrio Garrote, de Tigre, es una de las zonas postergadas del distrito, donde viven más de 800 familias sin acceso a servicios urbanos básicos como el agua corriente, las cloacas, luz o gas.
Susto por el Covid-19
A fines de junio, en el barrio Almirante Brown de Tigre se diagnosticaron los primeros cuatro casos de coronavirus que desataron un fuerte temor a que se convirtiera en un posible foco de contagios como pasó en Villa Azul, en Quilmes y Avellaneda.
En El Garrote viven unos 2.500 habitantes y sólo alrededor del 60% tienen agua corriente dentro de su casa, dificultando ya desde el vamos la higiene necesaria para prevenir la pandemia.
Más allá del agua potable, toda la estructura del barrio es altamente precaria y la mayoría de sus habitantes viven del trabajo informal, por lo que necesitan salir a buscar el sustento en tareas en las cuales no existe cuidado ni prevención.
Con protocolos de aislamiento comunitario y testeos, el Municipio de Tigre logró controlar la situación y evitar que se multiplicaran los contagios.
Algo similar ocurrió en el barrio San Jorge, otra zona de viviendas precarias, donde llegaron a tener más de 120 casos de Covid-19.
AC