El Observatorio en el tiempo

63 El Observatorio amplía su mirada ¿No será tiempo de revisitar a Matus y debatir su idea de plan como instrumento que precede y preside a la acción? Creo que hoy es necesario que plan y acción se retroalimenten, dando como resultado planes integrales que combinen acciones durante el proceso de planificación. De esta manera, se puede generar el capital social necesario para que los actores puedan trabajar mancomunadamente, co-creando sus propias soluciones basadas en el talento y reforzando con la acción la confianza en su capacidad de organización. Este método de trabajo lo he denominado PlanificAcción. Un juego de palabras que transforma la planificación tradicional, potenciándola y adaptándola a las necesidades de la sociedad actual, que necesita ver resultados antes de empezar. Y en los resultados, o pequeñas victorias del colectivo que lo impulsa, va forjando una identidad de grupo y la confianza para afrontar mayores desafíos, como por ejemplo el desarrollo de una estrategia de mediano plazo. Comenzó a implementarlo el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) en cinco grandes aglomerados de la Argentina: Gran Córdoba, Gran Mendoza, Gran San Fernando del Valle de Catamarca, Gran Resistencia y Puerto Madryn. La Ciudad de Buenos Aires está lista para iniciar pro- cesos de PlanificAcción en simultáneo para cada uno de sus barrios, para luego escalarlos a la totalidad de la ciudad. Si queremos lograrlo, hace falta contar con una visión política dispuesta a apoyar el proceso par- ticipativo, arriesgándose a perder parte del control. También es clave dotar de recursos genuinos a los procesos de planificación para que se puedan admi- nistrar recursos y concretar los proyectos que surjan de esa dinámica. Asimismo, se requiere una nueva forma de organización, que debe apoyarse fuerte- mente en las organizaciones sectoriales y barriales, y utilizar a las comunas como punto de articulación. El método ayuda a acortar la brecha entre la lectura técnica y la construcción política. La PlanificAcción debería cubrir primero los barrios de la ciudad y, por qué no, incluir el área metropoli- tana en una segunda etapa, en la medida en que se comience a trabajar con los municipios del AMBA de manera mancomunada. Este paso, fundamental para la historia de nuestra metrópoli, requiere la partici- pación y el convencimiento de los intendentes del AMBA, así como de las autoridades de la ciudad y la provincia de Buenos Aires. Un barrio, un plan y una visión de ciudad que plasma sus obras siguiendo una estrategia integral y estratégica, apoyada en el capital social que supo construir en el proceso. 