Dossier #04 - Residuos sólidos urbanos

8 este sentido, ayuda a distinguir con relativa facilidad el perfil de una intervención en particular y sus alternati- vas de complemento con otras. Sin embargo, a pesar de los espacios ganados, las alternativas: • no agotan las posibilidades de inclusión que pueden darse. • los logros alcanzados no constituyen un punto de llegada respecto de una serie de reivindicaciones y reclamos que las propias organizaciones de los carto- neros plantean. • ni esos logros se encuentren extendidos a todos aquellos que practican la actividad, aún dentro de una misma localidad. Es decir, todavía el futuro de la inclusión de los cartone- ros en la gestión de los residuos puede depender de la voluntad de las autoridades al frente del gobierno local. ¿Por qué, a pesar de los avances que muestran clara- mente una mejora en términos de inclusión, persiste la idea de que se está en un estado de transición que aún no se completa? Pueden aventurarse, entre otras, algunas hipótesis: • fortaleza de intereses creados que tienen rentabilidad con el viejo estado de las cosas (públicos y privados), basado en la recolección y la disposición final indiscri- minada. • falta de decisiones políticas para llevar a cabo trans- formaciones a fondo cuyos resultados sólo pueden visualizarse a mediano y largo plazo, pero con costos políticos y económicos inmediatos. • ausencia de equipos de trabajo interdisciplinarios, bien formados, que contemplen todos los aspectos involucrados en una gestión integral, no exclusiva- mente los vinculados a la ingeniería sanitaria o las comunicaciones • falta de promoción del reciclaje a nivel industrial dejando que sea una cuestión que se resuelve pura y exclusivamente en base a las leyes del libre mercado o el marketing. Antes de reflexionar sobre medidas concretas para consolidar la inclusión, habría que reconocer que la práctica de esta actividad no suele estar ligada a un acto vocacional, sino a encontrar una fuente de sustento frente a una realidad que no ofrece muchas otras alternativas de empleo. Se podría pensar que si existiera pleno empleo no sería fácil hallar voluntarios para la recolección informal. Pero se puede observar que, más allá de los distintos períodos que atravesó el país, en la medida en que por un lado hubo demanda industrial para materiales reciclables, y por otro, acceso a dichos materiales, siempre existieron actores que encontraron una fuente de ingresos satisfaciendo dicha necesidad industrial. Dada entonces esta continuidad histórica y los logros obtenidos actualmente, se abren en esta coyuntura oportunidades para planificar mejores condiciones para la existencia de esta experiencia. Si se considerara el cuidado y la preservación del ambiente como políticas de estado, no debería dejarse al libre juego de la oferta y la demanda el estímulo para el consumo de material primas reciclables. A cualquier política pública que pretenda introducir modificaciones sustantivas que resulten favorables a la actividad que realizan los recolectores, le incumbe también intervenir integralmente con políticas dirigidas al resto de los actores. De lo contrario se quedará corta de miras. Aquel relevamiento sobre las intervenciones hechas y su ubicación en una determinada categoría, no da cuen- ta de alternativas que podrían estar dirigidas a otros actores distintos de los recolectores y que podrían tener importantes repercusiones sobre éstos. La promoción del consumo de materias primas provenientes de este circuito por parte de las industrias que reciclan podría ser una de ellas. Este tipo de medidas implica asumir un cambio importante respecto del modo de concebir las intervenciones hacia los recolectores informales. Implica trascender a las agencias gubernamentales que se ocupan de la gestión de los residuos y a las agencias gubernamentales que se ocupan de la seguridad social, ambas con injerencia reconocida sobre los cartoneros, pero sin potestad para incidir sobre la demanda indus- trial de reciclables. Esto requiere trascender los espacios gubernamentales desde donde se vienen realizando las intervenciones sobre los residuos y sobre los recolec- tores informales (agencias ambientales y sociales-am- bientales), incluyendo así una perspectiva transversal y supra municipal. Reflexionar sobre esta necesidad es uno de los objetivos centrales de este artículo.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mjc3NzY=