Dossier #03 - Hábitat

7 A pesar de los esfuerzos de toda la década, el déficit de vivienda está cristalizado en tres millones de uni- dades. En una mirada rápida por el campo del hábitat, los programas del FONAVI, el Programa Federal de Vivienda, y el plan ProCreAr, han sido siempre pensa- dos en relación a los sectores más fragilizados, pero la realidad es que en las provincias, tanto el FONAVI como el Federal han resuelto problemas de sectores medios. Entre ellos no difieren mucho en la producción de viviendas ni en los montos de los fondos, pero sí en las características del manejo de cada uno: el Federal es un programa centralizado, mientras que el FONAVI transfería la responsabilidad a las provincias, que definían cuál era su prioridad de ejecución. El Programa Federal de Vivienda tiene una serie de componentes que han sido importantes; uno en particular, el PROMEBA, se ha convertido en un programa de política pública. Se mantiene gracias al financiamiento BID, que le confiere certeza de su continuidad. Pero el Federal, tal como fue aplicado en el conurbano, está desconectado de los centros urba- nos, con problemas de accesibilidad y equipamiento. Para una familia muy precarizada, la vivienda sola no es la solución: sin inserción en el aparato productivo la vivienda no se puede sostener y se la abandona, perdiéndose el objetivo y esfuerzo del Estado. El ProCreAr es una respuesta a la demanda insatis- fecha de los sectores medios. Aunque no soluciona toda la problemática, es una respuesta importante en el sentido de poder recuperar suelo, que es una de las problemáticas centrales: hoy la falta de suelo es más compleja que la construcción de viviendas. Es central que el Estado trate de posicionarse en un lugar de fuerza, y esto es posible a través de su par- ticipación en el mercado de suelo. En nuestro país, el campo del hábitat tiene rango de Subsecretaría, a diferencia de otros países del área: no es un proble- ma de burocracia formal sino de decisiones políticas. Me permito pensar en la posibilidad de continuar juntándonos asistentes, entidades y organizaciones, creando un foro permanente para discutir y reflexio- nar, formando una masa crítica para enfrentar las problemáticas, que nos ayude a interpelar en los próximos meses a los distintos candidatos políticos posibles para el año próximo, desde un sector que tendría una fuerza unificada. El Estado y su participación en el mercado del suelo Carlos Pisoni Director Instituto Hábitat Urbano CPAU – Director Maestría Pobreza Urbana FADU-UBA